Adiós Gustavo,
Ayer, me enteré de tu decisión de partir después de varios años dormido, decidiste despertar hacia otra vida. Alivio, no lo se, inevitable tal vez, como sea, aun duele y genera pena que te hayas ido de viaje.
Gracias totales por la música, por las canciones que con Soda y solo hiciste. Un solo país te quedo chico, Cerati ídolo acá y allá, cerca y lejos, tu voz suena y sonará más que nunca. No hay palabras para describir lo que tu vació deja, sabiendo que el espacio que ocupaste no se llenará mas.
No importa si es una banda de moda haciendo “Persiana Americana” o si es mi madre que te escucha cantando con la Negra Sosa una hermosa “Zona de Promesas”, lo que importa, lo que verdaderamente es importante es que tu música está ahí, en nosotros, sin importar donde estemos, te llevamos.
Parece mentira, se fueron muchos, Pappo, el Flaco, y ahora vos… escucharemos de otra manera tus canciones, serán otras las personas que escucharan tu voz, pero vos estarás siempre ahí, sabiendo que decir adiós es crecer.
Ezequiel Escobar
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