Pienso Música en Vivo: JACK JOHNSON, Buenos Aires, Argentina - 19 mayo 2011

Foto cortesia: Mariano Nico mariano_rivero@yahoo.com.ar 

Dicen que la belleza está en las cosas simples y así lo demostró este hawaiano a lo largo un sentido show de una hora y cuarenta y cinco minutos.

Con una guitarra acústica y vestimenta informal, Jack Johnson se vio acompañado por tres músicos: el multi-instrumentista y corista Zack Gill - dotado de una privilegiada voz como lo demostró en uno de los momentos pico de la noche - el bajista Merlo Podlewski y el baterista Adam Topol, quienes redondean el muy bien formado ensamble.

Con un tímido español y mucha sencillez, el músico que acaba de cumplir 36 años (18/05/1975) se paseó por sus cinco discos editados, además de un tema de aquel trabajo que junto a otros músicos realizó para la banda sonora de "Curious George".

Foto Cortesia: Segismundo Trivero (rollingstone.com.ar)

La velada comenzó con "You and your heart", la canción que inició la promoción de To The Sea y que además se convirtió en su tema mejor rankeado internacionalmente. Un ligero problema de sonido, fue solucionado inmediatamente y el cuarteto llegó a sonar de manera impecable a lo largo de la noche. "If I had eyes" y "Hope" - ambas de Sleep Through The Static - siguieron a continuación y en ese momento quedé sorprendido por la gran cantidad de gente que se sabía las letras de los temas.

"Taylor" y la popular "Sitting, waiting, wishing" fueron cantadas a voz en cuello y entre "Go on" y "Upside down", Johnson provocó algunas risas al olvidarse las letras - hecho que se repitió otras dos o tres veces a lo largo de la noche - pero su naturalidad, hizo que la gente lo tome como una nota divertida. "Hace un largo tiempo que no tocamos" y "me distraje porque alguien detrás del escenario me lanzó una polera a la cabeza" fueron algunas de las frases que utilizó el cantante para salir del paso.

Foto cortesia: Julieta Alvarez

Hasta ese momento, el show había fluido entre hits y eran siete los sencillos oficiales los que había interpretado el hawaiiano; pocos músicos con su trayectoria, se animan a hacer eso de entrada. Inmediatamente, se fue por un lado menos "comercial" - si vale el término - y ofreció un medley de "The horizon has been defeated", "Bad Fish" e "Inaudible melodies". La gran pantalla dispuesta al fondo del escenario mostraba distintas imágenes y colores, que entre portadas de los discos, instantáneas del mar y tomas en movimiento de los músicos, acompañó a la perfección las cálidas canciones. Creo que fue una de las mejores experiencias visuales que tuve en un show musical y cabe resaltar la excelente iluminación, que sin ser pretenciosa, le dio un acogedor aire al escenario principal del club GEBA.

En "Flake" inevitablemente me transporté a 2002 y la vez que me tocó presentarla en la radio. Es una canción que nueve años después, sigue sonando muy fresca. Nuevamente las casi 20 mil personas que se dieron cita, acompañaron cantando y la no tan conocida "Red wine, mistakes, mythology" tuvo un tímido coreo. Luego fue el turno de una seguidilla de temas con letras de amor: "Tomorrow morning", "Bubble toes" y "From the clouds", ésta última, actual sencillo en promoción.



Había transcurrido una hora y todavía restaba camino por recorrer; la gente quería más, esperaba más y tendría más. "Wasting time" sirvió para que Zack Gill demuestre su calidad vocal - hace la primera voz en parte del tema - seguida por la casi reggae "Breakdown", volviendo a territorio reciente con "My little girl" que se fundió en una linda versión de "I wanna be your boyfriend" de los Ramones. El éxtasis era evidente en ese momento y el público, mayoritariamente femenino, no dejaba de aplaudir y acompañar cantando o gritando "jackjhon" "jackjohn" (sonaba a "jackson", pero bueno, lo que cuenta es el sentimiento).

Foto Cortesía: Leo La Valle - EFE

La seguidilla de canciones de Sleep Through The Static - su disco mejor vendido - llegó luego con "Banana pancakes", "Staple it together" y "Good people", para dar paso a "At or with me", uno de sus temas más encendidos, que con brincos incluidos nos tuvo cantando ese "oooooo  oooooh". La energía flotaba por doquier y reíamos de y con Jack.

Los músicos abandonaron el escenario y no había nada más que exigir si todo acababa ahí. Completa entrega es lo que habíamos recibido de esos cuatro músicos y el setlist había visitado prácticamente todos los rincones esperados. Los vivas y los aplausos, trajeron de vuelta a un Johnson solo brindando emotivas versiones de "Do you remember", "Angel", "Times like these" y "Gone", para invitar por vez final a sus acompañantes a hacer "Better together". Mejor epílogo que ese? Difícil...    

Foto Cortesia: Segismundo Trivero (rollingstone.com.ar)

Personalmente, considero que un Jack Johnson hubiera sido mejor apreciado en un lugar pequeño y no como parte de un festival. Quizá un par de fechas en un Luna Park u otro recinto de similar capacidad, le habrían hecho aún más justicia a un músico de alta calidad como el que vimos en el inicio del Quilmes Rock.

Gracias Jack, gracias por la simplicidad y como dice la canción, nos quedaremos "sentados, esperando, deseando" tu pronto retorno.

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Pato Peters