'Crying' de Roy Orbison | Clásico de la Semana

El Caruso del rock n roll. Así llamaban a Roy Orbison, por su poderosa voz que hacia recuerdo al tenor italiano. Nacido en 1936 en Vernon, Tejas, Orbison vivió su época de mayor éxito en los 60s, cuando en tan solo un periodo de cuatro años tuvo 22 canciones en el top 40 de la Billboard.

Sus características gafas negras y sus baladas de letras oscuras y emocionales han hecho de Orbison uno de los artistas más respetados de la industria, hasta su muerte en 1988 con tan solo 52 años. Sin embargo, su legado sigue muy vigente.

En julio de 1961 editó “Crying”, un duro y triste bolero que tuvo como lado B a “Candy Man”. Fue un éxito absoluto llegando al #1. A la fecha sigue teniendo un poder cautivador casi fantasmal y mágico. El arreglo vocal de Orbison es de los más finos y emocionantes, donde alcanza notas que erizan la piel.

“Crying”, junto a “Oh, Pretty Woman” y “Only The Lonely”, es una canción emblemática y una de las más conocidas de su carrera. En 1987 fue regrabada con KD Lang, y por esta versión se hicieron de un Grammy. En 2001 “Crying” ingreso al Salón de la Fama de los Grammy y fue rankeada por la revista Rolling Stone en el puesto #69 de de las 500 mejores canciones de la historia.

"You wished me well, you couldn't tell that 

I've been crying over you"

Orbison sufrió un poco en los años 70s, donde los éxitos no llegaron. Sin embargo el destino, o el azar, permitió que se una con George Harrison, Bob Dylan, Tom Petty y Jeff Lynne, para formar el supergrupo The Traveling Wilburys en 1988, además de editar nuevos álbumes solistas. Justo en el renacer de su carrera, un lamentable infarto, le quitó la vida.

Por esa voz inconfundible, su complejidad en arreglos musicales y por sobre todo por el estilo propio de sus canciones, Orbison fue inducido al Salón de la Fama del Rock n Roll en 1987. Estamos ante una artista poderoso e influyente, donde para describirlo las palabras sobran. Barry Gibb afirmó que cuando escuchó “Crying” por primera vez pensó “Esto es. Para mi, ésta es la voz de Dios”. 

Hoy, simplemente recomendamos escuchar “Crying” a todo volumen. Dejarse llevar por esta voz única y emocionarse hasta las lágrimas mismas.